La Fórmula 1 ha vivido un momento emocionante, y no es para menos. El piloto argentino Franco Colapinto, originario de Pilar, ha sido anunciado por Alpine como el nuevo conductor del A525, en sustitución de Jack Doohan. Esta noticia, que resuena con fuerza en Argentina, trae consigo una pequeña sombra: su contrato está limitado a solo cinco carreras. Sí, así como lo oyes, Ímola, Mónaco, Barcelona, Canadá y Austria son las únicas pistas donde Colapinto podrá demostrar lo que vale.
Una presión constante y un reto sin precedentes
Aunque superar el rendimiento de Doohan no parece una tarea titánica (un 13º puesto en China), la realidad es que Colapinto se enfrenta a un desafío monumental. No es lo mismo que su etapa en Williams en 2024; esta vez no hay lugar para la relajación. ‘Voy a darlo todo para alcanzar la velocidad y conseguir los mejores resultados junto a Pierre’, declaró el joven piloto con una determinación palpable.
No obstante, esto es solo el principio. La visión de Alpine apunta hacia un futuro incierto; están cambiando motores y dejando atrás la protección de Renault para aliarse con Mercedes en 2026. Flavio Briatore, impulsor de Colapinto y nuevo jefe del equipo, enfatiza la necesidad de evaluar al máximo sus pilotos. Y eso significa que cada carrera cuenta.
La palabra ‘evaluación’ resuena con fuerza entre los directivos del equipo. Mientras tanto, Colapinto sigue trabajando incansablemente y participando en entrenamientos privados en Zandvoort. Aquí va a buscar ese feeling necesario para adaptarse a las novedades del coche 2025.
En definitiva, ha llegado su momento. Este piloto tiene todo por demostrar ante un público ansioso por ver cómo se desenvuelve bajo presión. Ahora solo queda esperar e ilusionarnos con cada vuelta que dará al volante.