Rodrigo Riquelme fue el alma del Betis en su encuentro ante el Torrent, donde no solo brilló, sino que dejó claro que su hambre de gol sigue intacta. En un partido correspondiente a la Copa del Rey, el madrileño se despachó con un espectacular ‘hat-trick’, guiando al equipo hacia una victoria contundente por 1-4. Esta actuación no solo le da moral a él, sino que también impulsa la confianza del equipo en esta competición tan impredecible.
Un paso firme hacia adelante
Al finalizar el encuentro, Riquelme se mostraba feliz por haber logrado avanzar en la copa. «Venimos con una mentalidad clara, como nos ha dicho el míster: cada partido es crucial. Sabemos que hay detalles que pueden sorprendernos si bajamos la guardia», comentó con ese brillo en los ojos propio de los grandes momentos. Y vaya que lo hicieron bien; cumplieron con lo que les pidió y lograron clasificarse.
Con tres victorias seguidas bajo el brazo, Riquelme resaltó la importancia del trabajo colectivo: «Todos estamos metidos en esto, tanto quienes juegan más como aquellos que tienen menos minutos. Cada vez que se presenta la oportunidad, hay que darlo todo». Para él personalmente fue un alivio ver cómo sus esfuerzos empiezan a dar frutos.
Aunque su triunfo fue rotundo esa noche, confesó entre risas sobre su lucha personal para marcar goles en LaLiga: «Es curioso porque parece que me está costando más ahí. Pero sigo trabajando y disfrutando de estar aquí; estoy convencido de que poco a poco irán llegando».
Con ansias de seguir adelante y sin miedo al desafío, ya mira hacia el próximo gran partido contra el Barça: «Vamos a por ellos y queremos darle una alegría grande a nuestra afición». Un deseo compartido por todos nosotros.

