En una jornada que quedará grabada en la memoria de los aficionados, El Sardinero se llenó de emoción al ver el regreso del capitán Íñigo Sainz-Maza, quien tras nueve meses y 17 días de sufrimiento por una grave lesión, volvió a calzarse las botas. Pero eso no fue todo; también asistimos al debut de Asier Villalibre como racinguista, justo unas horas después de firmar su contrato. ¡Vaya manera de entrar en la historia!
Un empate que sabe a victoria
El partido amistoso contra el Cagliari finalizó con un 1-1, pero lo importante para nosotros, los hinchas, era ver a Íñigo en acción nuevamente. A medida que avanzaba el encuentro, se notaba cómo él y Villalibre empezaban a conectar. Y es que no hay nada como ver esos destellos de calidad sobre el césped.
Villalibre estuvo activo desde el primer minuto y hasta logró asistir a Andrés para abrir el marcador. Una jugada que hizo vibrar a todos los presentes. Sin embargo, el Cagliari no se quedó atrás; empató tras un tiro desafortunado que acabó en gol gracias a un desvío. Pero lo verdaderamente relevante fue la sensación palpable en El Sardinero: alegría por volver a tener a Íñigo con nosotros.
Con este encuentro, el Racing cierra la pretemporada invicto y con buenas sensaciones ante el inicio de la Liga. No solo se trata de números; esta comunidad ha demostrado su pasión y compromiso por su equipo. Así que vamos preparando los corazones porque esto apenas comienza.