En Barcelona, la historia de Ter Stegen ha tomado un rumbo inesperado. Mientras el FC Barcelona parece decidido a deshacerse del portero alemán como si fuera un mero objeto, él se levanta y dice «basta». Aquí no estamos hablando solo de fútbol; esto es algo que muchos hemos vivido en nuestra propia piel. ¿Cuántos de nosotros hemos visto cómo alguien cercano se deja pisotear en su trabajo? Y ahora, ¡qué ironía! Algunos aficionados culpan a Ter Stegen por defender lo que es suyo.
Un grito de indignación
Parece increíble que haya barcelonistas enfadados con quien se atreve a plantarle cara al club que le paga. Es como si tuviéramos un amigo al que le dicen «tira para casa» y lo miramos mal por no querer irse sin luchar. Todos hemos sentido esa rabia cuando vemos que alguien intenta aprovecharse de otro. Así que, reflexionemos un poco: ¿de verdad queremos ver cómo tratan a uno de los nuestros así? En este juego, hay mucho más en juego que simplemente ganar o perder partidos.