La situación es crítica para Boca Juniors. El club, que se encuentra en la antesala del Mundial de Clubes, ha recibido una noticia que no esperaban: Estados Unidos ha negado la visa a Ayrton Costa, su central, lo que deja al equipo xeneize con un gran vacío en su defensa justo antes de debutar contra el Benfica.
A pesar de sus esfuerzos, parece que las puertas se cierran para Costa. La embajada estadounidense ha denegado al menos dos veces su solicitud de visa. ¿Y ahora qué? Desde Boca están trabajando contrarreloj, buscando cualquier resquicio que les permita contar con el jugador. La esperanza está puesta en que la embajada revise favorablemente una tercera petición o en que FIFA intervenga y facilite un permiso temporal para el futbolista.
Un pasado complicado
Pero hay más tras esta negativa. Según fuentes desde Argentina, el jugador ya había enfrentado problemas migratorios anteriormente cuando defendía los colores de Independiente. Su nombre aparece vinculado a dos causas judiciales: un robo donde fue señalado como amigo de los autores y un caso grave relacionado con violencia de género por el cual su hermano es acusado y él figura como encubridor.
No se ha avanzado legalmente contra él, pero eso no parece ser suficiente para convencer al servicio de inmigración estadounidense. Es frustrante ver cómo un joven talento se ve atrapado entre las sombras del pasado y un futuro incierto.
Boca Juniors sigue luchando por encontrar una solución mientras los días pasan y el Mundial se acerca. La afición espera con ansias la resolución, porque cada minuto cuenta en este apasionante torneo internacional.