El Celta de Vigo ya tiene casi lista su pretemporada, que, por lo que parece, será un calco de la del verano pasado. La idea es clara: mucho trabajo en la Ciudad Deportiva Afouteza y también un emocionante viaje a Inglaterra para jugar uno o dos amistosos que nos mantendrán en vilo.
Una vuelta al trabajo marcada por las expectativas
Los celestes regresarán a los entrenamientos el próximo 1 de julio. Después de un par de días dedicados a pruebas analíticas, se lanzarán al campo durante seis semanas. Todo esto con el objetivo de mejorar, especialmente porque la próxima temporada viene cargada de retos con nuestra participación en la Europa League.
A lo largo de esta pretemporada, el plan es jugar seis partidos amistosos, empezando suave y subiendo la intensidad poco a poco. Entre los rivales destacan algunos equipos portugueses y, ya en la recta final, ¡nos espera ese esperado viaje a Inglaterra!
Miguel Román, del filial, es el único confirmado hasta ahora para este periodo preparatorio tras haber estado entrenando con el primer equipo al final de la última liga. Y Claudio Giráldez confía en que antes del inicio oficial pueda reducir el número de jugadores en plantilla para facilitar un trabajo más eficaz y dar oportunidades a más jóvenes del filial desde el principio.