En una cálida tarde en Mallorca, Sergi Darder, el centrocampista de Artà y pieza clave del Real Mallorca, se toma un respiro durante sus vacaciones para reflexionar sobre la temporada pasada y lo que está por venir. Con su habitual sinceridad, Darder habla claro: «El objetivo debe ser no quedar por debajo del top-10». Y es que después de haber anotado dos goles y repartido seis asistencias en 38 partidos de liga, el jugador tiene razones para soñar.
Un verano de reflexión y golf
Mientras los demás se relajan, él no puede evitar pensar en el fútbol. Aunque reconoce que con niños pequeños a veces desconectar es complicado, aprovecha para jugar al golf y pasar tiempo con su familia. «Es necesario alejarse un poco de la tensión diaria», dice, mientras recuerda cómo este deporte le ha ayudado a mantener la mente despejada.
Darder reflexiona sobre una temporada que tuvo altibajos. «El final fue un poco decepcionante», reconoce, pero también subraya que sumar 48 puntos no es moco de pavo. Había ilusión en el aire y esa chispa hizo vibrar a los aficionados.
Aún así, se siente frustrado por no haber alcanzado Europa. «Era una oportunidad histórica», comenta con nostalgia. Sin embargo, no pierde la fe: “Si mantenemos esta inercia positiva, algún año llegaremos”, afirma convencido.
Con mirada fija en el futuro, Darder establece su meta clara: «No podemos caer más abajo del décimo puesto». La ambición está presente en cada palabra; sabe que si llegan fichajes que aporten al grupo y todos trabajan juntos como hasta ahora, la clasificación podría mejorar.
Sus palabras reflejan autocrítica y deseo de superación: “Hay gente que espera mucho más de mí”, confiesa. Pero él siente que ha dado lo mejor cada partido y eso le deja tranquilo. Conocedor de su cuerpo y las exigencias del fútbol moderno, Darder comparte su secreto para mantenerse sano: saber escuchar sus necesidades físicas.
Finalmente, remata con una sonrisa: “Alargar mi carrera es una prioridad”. Y así queda claro; Sergi Darder no solo juega al fútbol; sueña a lo grande mientras disfruta cada paso del camino.