En el corazón de Huesca, Martín González, el director deportivo del club oscense, ha hecho un alto en el camino para compartir sus pensamientos sobre la reciente temporada. Y vaya que hay mucho que contar. Con una sonrisa sincera, asegura que «la temporada ha sido espectacular», subrayando las alegrías continuas y la impresionante competitividad mostrada por su equipo.
El futuro se asoma con incertidumbre
Aún sin un nuevo entrenador confirmado, Martín tiene la esperanza de que pronto se haga oficial. Mientras tanto, espera poder contar con jugadores clave como Sergi Enrich y Javi Mier. Sin embargo, reconoce que la situación de Javi Hernández es más complicada; aunque no pierde la fe. La realidad es que los otros jugadores cuyo contrato finaliza no continuarán.
El objetivo de construir una plantilla ilusionante sigue firme. Pero aquí viene lo interesante: González prefiere esperar a tener al nuevo míster antes de hacer movimientos en el mercado de fichajes. Entre los nombres mencionados están Ibai Gómez y Juanfran como posibles incorporaciones.
«No es fácil encontrar un ‘perfil Antonio Hidalgo'», admite Martín. Lo importante es que quien venga tenga claras sus ideas y esté convencido del proyecto. Está claro que quiere a alguien con el mismo espíritu futbolístico, pero también sabe que eso depende del futuro entrenador.
Con respecto a Sergi Enrich, las conversaciones han fluido durante toda la temporada y él mismo ha expresado su deseo de quedarse: «Nos ha dado mucho dentro y fuera del campo». Y así es como se construye un equipo: valorando a quienes hacen más que solo jugar.
A medida que avanza la charla sobre cedidos y salidas, queda claro que hay algunas situaciones pendientes por resolver; nombres como Javi Pérez y Jeremy Blasco aún no tienen definido su futuro. Pero para los demás cuya renovación no llegó a buen puerto, parece haber consenso: quieren tomar otro rumbo.
González también destaca lo bonito de tener en Huesca un equipo en fútbol profesional: «La afición ha sido una parte fundamental del éxito». Asegura con orgullo cómo el apoyo incondicional de los hinchas ha empujado al equipo a ganar incluso en los momentos más difíciles.