El Real Valladolid acaba de dar un paso importante que ha dejado a muchos con el corazón encogido: Álvaro Rubio no continuará al mando del primer equipo en la próxima temporada. Tras dirigir al conjunto blanquivioleta en 17 partidos oficiales, su salida se siente como una despedida cargada de emociones. Y es que, aunque llegó para tomar las riendas tras la destitución de Diego Cocca, no pudo evitar el descenso y eso pesa.
Antes de enfrentarse a la última jornada de LaLiga, el técnico riojano ya había dejado entrever que su futuro era incierto. «No he hablado nada con el Club y tampoco he querido hacerlo de momento. No voy a estar aquí eternamente, pero no me cierro a nada», declaró, dejando claro que sabía que esta etapa podría llegar a su fin. Pero ahora, el club ha tomado la decisión definitiva: no habrá continuidad en Segunda división.
Un cambio necesario
Rubio había llegado al Valladolid tras una exitosa labor al frente del filial en Segunda RFEF. Sin embargo, este nuevo reto no fue fácil y los resultados hablan por sí mismos. El sentimiento entre los aficionados es mixto; hay quienes agradecen su esfuerzo y dedicación, pero también existe una palpable necesidad de cambio para afrontar lo que viene por delante.
Así queda marcada otra página más en la historia reciente del club pucelano. Con el futuro incierto y muchas decisiones por tomar, solo nos queda esperar qué rumbo tomará el Real Valladolid mientras se prepara para afrontar nuevos desafíos en la próxima temporada.