Girona. Tras una temporada llena de altibajos, donde el equipo catalán se ha encontrado en una situación complicada, el Girona está listo para dar un nuevo paso. La conclusión de la última campaña dejó un sabor agridulce: por un lado, la alegría de haber competido en la Champions League y, por otro, el estrés de pelear hasta el último instante por evitar el descenso. Y todo esto con el mayor presupuesto en su historia (113 millones) y un límite salarial que no fue suficiente (98,8 millones).
Retorno a los entrenamientos
Con una fiesta que terminó abruptamente tras una derrota clara contra el Atlético (0-4) y bajo un calor aplastante que hizo sudar hasta a los más fervientes seguidores, el club blanquirrojo ha fijado el 8 de julio como fecha para retomar los entrenamientos de cara a la pretemporada del curso 2025/26.
Durante la segunda semana de preparación, los jugadores se desplazarán a la hermosa Vall den Bas en La Garrotxa. Allí realizarán una concentración intensa antes de enfrentar sus primeros amistosos, probablemente contra equipos locales como el Olot o alguna formación francesa que busque entrenar en la zona.
Míchel seguirá al mando y tanto él como la directiva han dejado claro que están comprometidos a seguir juntos otra temporada más. El técnico madrileño expresó su agradecimiento hacia los aficionados tras cerrar esta etapa: «Hemos terminado una campaña dura que no salió como esperábamos. Aun así, supimos resistir y alcanzar nuestro objetivo principal: quedarnos en Primera».
Míchel también compartió su deseo de desconectar y recargar energías antes del nuevo desafío: «Es hora de planificar lo que viene y seguir construyendo algo bonito aquí en Girona. Estamos motivados y listos para reivindicarnos. ¡Nos vemos pronto!».