En un vibrante encuentro en St. James Park, el Newcastle hizo gala de su poderío al vencer por 4-1 al Manchester United, dejando claro que están listos para pelear por un puesto en la Champions. Con un espectáculo lleno de energía, los de Eddie Howe no solo cumplieron las expectativas, sino que arrasaron con una brillante actuación liderada por un inspiradísimo Harvey Barnes.
Un primer tiempo lleno de emociones
Apenas comenzó el partido y ya se notaba que el Newcastle iba a dar guerra. En el minuto 1, una jugada rápida tuvo que ser anulado por fuera de juego, pero eso no detuvo su ímpetu. Antes de cumplir media hora, Sandro Tonali abrió el marcador con una magnífica asistencia de Isak. El exjugador del Milan estaba imparable y casi marca el segundo con un potente disparo desde lejos.
No obstante, apareció Garnacho, quien aprovechó un contragolpe para empatar momentáneamente. Sin embargo, la segunda parte fue otra historia. Con una jugada colectiva espectacular, los locales volvieron a tomar la delantera gracias a Barnes, quien no tardó en sentenciar el duelo con otro gol que dejó sin respuesta al United.
Cerrando la noche con broche de oro para los ‘Magpies’, un error monumental del portero Bayindir culminó en el 4-1 final. Así es como se vive el fútbol: emociones intensas y giros inesperados. Esta victoria posiciona al Newcastle cuartos en la tabla y les da esperanzas reales para soñar con estar entre los mejores.