Las Palmas se prepara para un nuevo desafío en la liga, y todos los ojos están puestos en Diego Martínez. Este sábado, el técnico de la UD Las Palmas se enfrentará a un viejo conocido, José Bordalás, entrenador del Getafe. La pregunta que nos hacemos es clara: ¿optará por un juego más conservador o se lanzará a la ofensiva?
Martínez ha estado experimentando con diferentes alineaciones últimamente. Ya sea jugando con un delantero, dos o incluso organizando una defensa de cinco jugadores, su objetivo es encontrar esa fórmula mágica que le permita superar a un rival que no da tregua. Tras el partido contra el Celta, dejó entrever su estrategia al decir: «Cuando hemos tenido buenos resultados fuera de casa es cuando hemos llegado más justos en el marcador al descanso». Para él, mantener la cercanía en el marcador durante los momentos decisivos es crucial; así lo ha vivido su equipo.
Un rival complicado y la necesidad de ganar
El Getafe siempre ha sido sinónimo de intensidad y solidez bajo la dirección de Bordalás. Este equipo plantea una presión alta y no perdona los errores ajenos. «Es un equipo muy intenso que tiene claro cómo afrontar los partidos», reconoció Martínez en enero, entendiendo bien lo que implica este encuentro. Y aquí surge el dilema: ¿deberá Las Palmas optar por una postura defensiva como hizo en Vigo? La realidad es que necesitan sumar puntos urgentemente en Madrid para salir del bache y evitar caer demasiado lejos de la zona segura.
El próximo sábado será clave para afinar su estrategia y utilizar sabiamente cada cambio desde el banquillo según evolucione el partido. Con un Getafe dispuesto a luchar cada balón, será esencial mantener la concentración y demostrar paciencia. Martínez tendrá que decidir entre ser sólido atrás, arriesgarse a atacar o buscar ese equilibrio perfecto que les lleve al triunfo. Como él mismo dijo hace unos días: «No podemos regalar cosas»; una frase que resuena fuerte mientras se acerca este crucial duelo.