En el corazón del vestuario del Real Madrid, una conversación íntima se ha convertido en un tema de interés. Fede Valverde, con esa mezcla de humildad y determinación que lo caracteriza, ha abierto su corazón sobre el dorsal 8 que ahora lleva en su espalda, un número cargado de historia gracias a Toni Kroos.
Durante una reciente entrevista con los medios oficiales de la UEFA, Valverde compartió cómo tomó la decisión de heredar ese mítico número. «Al principio, no quería tomarlo por respeto a quien lo llevó antes», confesó. Para él, Kroos no es solo un compañero; es un ícono que dejó una huella imborrable en el club. Y aunque tuvo sus dudas, todo cambió cuando recibió la bendición del propio alemán: «Cuando Kroos accedió a que yo usara ese número, sentí como si me quitara un peso de encima. Era mi momento y decidí disfrutarlo».
La emoción de jugar en el Madrid
El uruguayo también habló sobre lo que significa vestir la camiseta del Madrid. «Hay que estar feliz y orgulloso de lo que representas», dijo con brillo en los ojos. Esa camiseta no solo es un trozo de tela; es un símbolo que te hace sentir más fuerte cada vez que pisas el campo. Todos esos dolores desaparecen cuando escuchas el himno mientras sales al túnel y ves a toda esa gente animándote.
Sobre la ambición del equipo tras tantos éxitos recientes, Valverde fue claro: «Esa hambre sigue intacta». Consciente del legado que tiene entre manos, sabe que cada partido es una nueva oportunidad para demostrar su valía y pelear por más títulos. En cuanto a la Champions, recordó su primera victoria como algo mágico e irrepetible: «Nunca será como aquella… pero siempre hay ganas de seguir ganando».