Desde aquel 2 de febrero, en el que el Celta sufrió una dolorosa derrota ante el Valencia en Mestalla, el equipo no ha hecho más que demostrar su carácter. ¿Quién lo diría? Desde entonces, los chicos de Claudio Giráldez han encadenado una racha imparable. Con la mente enfocada y el corazón en cada jugada, se han llevado victorias importantes en casa contra rivales como Betis y Osasuna, además de empatar a domicilio frente a gigantes como Atlético de Madrid y Girona.
El optimismo se respira en Balaídos
Fran Beltrán no puede ocultar su entusiasmo. “El partido contra Girona fue complicado, lo tuvimos casi en la bolsa”, comenta con la pasión reflejada en sus ojos. Y es que este equipo ha aprendido a luchar hasta el último minuto. “La temporada está siendo buena”, añade Beltrán. “Un mes atrás nos criticaban duramente; ni antes éramos tan malos ni ahora somos tan buenos”. El mediocampista deja claro que lo fundamental es mantener los pies en la tierra: “Hay que seguir trabajando para conseguir esa tranquilidad que tanto necesitamos”.
Sergio Carreira también comparte esta visión positiva. Reconoce que el empate contra Girona dejó un sabor agridulce pero asegura con firmeza: “Estamos en una buena dinámica y debemos seguir adelante sin relajarnos”. La afición empieza a soñar con un futuro brillante mientras la permanencia parece cada vez más cerca.