Este sábado, el Fibwi Palma tiene una cita crucial a las 18:30 horas en Son Moix. El equipo se enfrenta al Huesca en la vuelta de las semifinales del playoff de ascenso a la Primera FEB, tras haber caído por un ajustado 68 a 65 en el primer encuentro. Franco Miller y sus compañeros tienen solo 40 minutos y tres puntos que recuperar para alcanzar su sueño.
En ese primer choque, los de Pablo Cano dominaron hasta casi el final, pero la afición del rival empujó a Huesca hacia adelante en los momentos decisivos. Sin embargo, no todo está perdido; hay una segunda oportunidad y el ambiente en Son Moix siempre ha sido mágico. Recordemos que durante los octavos de final, perdían de 28 puntos ante Sevilla y con el apoyo incondicional de su gente lograron una remontada épica.
La importancia del apoyo local
Pablo Cano lo dejó claro: “esto es una final de 80 minutos” y cada uno debe remar en la misma dirección si quieren lograr lo que han perseguido durante toda la temporada. A pesar de que Cano minimiza el impacto del factor cancha desde un punto de vista técnico, reconoce que el empuje del público puede ser clave para llevarse esta victoria tan esperada.
El club ya ha lanzado un llamamiento a todos los aficionados para llenar Son Moix como nunca antes. Este año, hay mucha esperanza en el aire; podría ser el segundo ascenso a Primera FEB después de que el Palmer Basket lograra su hazaña hace poco más de un mes.
No solo es vital lo que ocurra con Fibwi Palma este fin de semana; también está en juego el futuro del Class Bàsquet Sant Antoni, que deberá vencer al Melilla tras caer por 107 a 85 en la ida. Así que este sábado será una jornada repleta de baloncesto y emoción tanto en Mallorca como en Ibiza. Los equipos necesitan ese apoyo extra que solo sus aficiones pueden brindarles para conseguir ascender después de tantos años persiguiéndolo.