La emoción se desbordó este sábado en Son Moix, donde el Palmer Basket Mallorca logró un hito memorable al conseguir su ascenso a la Primera FEB. La afición, que llenó las gradas y vibró con cada jugada, fue testigo de un auténtico espectáculo. El equipo necesitaba darle la vuelta a una desventaja de nueve puntos frente al Cáceres Patrimonio de la Humanidad y, vaya si lo hizo.
Una noche para recordar
Con un pívot en estado de gracia, Youssouf Traoré se convirtió en el héroe del partido al anotar 23 puntos. No solo fue su destreza en el aro lo que deslumbró, sino también cómo llevó a su equipo hacia una victoria aplastante por 76-58. Al final del encuentro, el ambiente era festivo; los jugadores se abrazaban entre risas y lágrimas de alegría mientras los aficionados coreaban sus nombres. ¡Qué manera de recuperar nuestro lugar en la categoría! El baloncesto mallorquín ha demostrado que nunca debe subestimarse.