El Palmer Basket regresa a su hogar con una misión clara: lograr su tercera victoria de la temporada. Pero no lo tendrán fácil, ya que este domingo a las 18 horas se enfrentarán al Obradoiro, un rival temido en la Primera FEB y firme candidato al ascenso a la Liga Endesa. Actualmente, ocupan el tercer puesto en la clasificación, habiendo cosechado ocho victorias frente a solo tres derrotas.
Un duelo complicado tras una dura derrota
Los chicos de Lucas Victoriano se preparan para este último partido como locales en Son Moix antes de visitar el Fibwi Mallorca, cerrando así un 2025 lleno de altibajos. Después de una contundente derrota ante el Tizona Burgos, donde cayeron por un abultado 95 a 59, es hora de levantarse. En ese encuentro, el campeón de la Segunda FEB del año pasado fue superado en todas las facetas del juego; especialmente en defensa, donde los rivales hicieron lo que quisieron desde más allá del arco.
Por otro lado, el Obradoiro llega con fuerza después de vencer cómodamente al Zamora por 106 a 80. Sus números son escalofriantes: un impresionante 67% en tiros de dos puntos y unos rebotes que asustan, alcanzando un total de 37 en su último partido.
En este contexto complicado, el técnico argentino del Palmer Basket asegura que deben trabajar intensamente si quieren sumar puntos positivos. «No es el rival ideal para este momento», reconoce Victoriano. Sin embargo, confía en que si logran defender juntos y correr con determinación por la pista, podrían generar problemas al Obradoiro.
Afrontan este encuentro con esperanza y determinación. «Ojalá podamos mostrar nuestra verdadera esencia», dice Victoriano con cierta melancolía sobre cómo los entrenamientos no se reflejan en los partidos. Este domingo será una prueba crucial para demostrar su compromiso y deseo de mejorar como equipo ante su afición.

