Desde hace un tiempo, el ambiente en Manacor se ha ido transformando. La noticia que hoy nos ocupa es que los coches no podrán circular por el querido callejón de Joan Lliteres y la emblemática plaza des Cós, al menos hasta que pasen las festividades de Sant Antoni. Una medida que, si bien puede causar inconvenientes a algunos, también representa una oportunidad para disfrutar del espacio público sin el ruido constante de motores.
Un cambio necesario
La decisión ha sido tomada con la intención de revitalizar estas zonas tan icónicas del municipio. Muchos vecinos han expresado su satisfacción, recordando lo agradable que es pasear sin tener que estar pendiente de los vehículos. Al fin y al cabo, ¿no es eso lo que buscamos? Un lugar donde podamos relajarnos y disfrutar en comunidad.
Esta iniciativa no solo busca reducir la contaminación acústica; también pretende promover un ambiente más saludable y amigable para todos. En tiempos donde el monocultivo turístico parece dominar nuestro paisaje, aquí se abre una ventana a la posibilidad de redescubrir nuestra identidad local.
A medida que se acercan las fiestas, el espíritu comunitario cobra fuerza. Todos esperamos ver cómo este espacio se transforma en un punto de encuentro vibrante, lleno de vida y alegría durante las celebraciones. Así que ya lo saben, ¡a disfrutar Manacor!

