En un reciente debate en el Foro de Doha, la Alta Representante de la Unión Europea para Política Exterior, Kaja Kallas, ha lanzado una advertencia clara: algunas críticas que llegan desde Estados Unidos son verdaderamente válidas. «Europa ha subestimado su propio poder frente a Rusia», afirmó con franqueza. Al parecer, es hora de que los europeos dejemos atrás esa falta de confianza y empecemos a valorarnos como realmente merecemos.
Kallas no se guardó nada al respecto. Durante su intervención, subrayó la importancia de mantener la unidad entre aliados, mencionando que incluso Estados Unidos tiene interés en que Europa siga siendo fuerte. «No siempre estamos de acuerdo en todo, pero seguimos siendo los mayores aliados», remarcó ante la periodista estadounidense Christiane Amanpour.
Una visión crítica sobre el futuro de Europa
La nueva doctrina exterior del Gobierno Trump es bastante contundente: advierte sobre un posible «borrado» de la civilización europea debido a políticas migratorias fallidas y una alarmante baja tasa de natalidad. Según el documento, si las cosas continúan así, dentro de 20 años nuestro continente podría ser irreconocible. Es una afirmación fuerte y preocupante.
Kallas también habló sobre las expectativas poco realistas que algunos líderes europeos tienen en relación con la guerra en Ucrania y enfatizó la necesidad urgente de restablecer relaciones estratégicas con Rusia. Para Washington, este distanciamiento refleja una alarmante «falta de autoestima» en Europa. En resumen, no solo queremos paz; necesitamos un enfoque más sólido y menos regulador para lograrlo.

