El pasado miércoles, mientras muchos de nosotros estábamos inmersos en nuestras rutinas, Estados Unidos anunció algo que podría cambiar las reglas del juego: la creación de su primer escuadrón de drones kamikaze en Oriente Próximo. Todo esto llega tras una orden del secretario de Defensa, Pete Hegseth, quien decidió que era momento de acelerar la adquisición y el despliegue de estos dispositivos no tripulados para operaciones militares.
Una respuesta rápida ante nuevos desafíos
Desde el Mando Central (CENTCOM) no han querido quedarse callados y han comunicado a través de su cuenta en la red social X que este nuevo cuerpo especial, llamado Cuerpo Especial de Ataque Escorpión, nace con un objetivo claro: proporcionar a los combatientes capacidades efectivas y económicas. Es como si dijeran «aquí tienes lo que necesitas para actuar sin demora».
Además, ya han formado un escuadrón bajo el nombre de LUCAS, dedicado a estos sistemas de ataque no tripulados. Estos aparatos tienen un rango impresionante y están diseñados para operar por sí solos, lo cual es tanto fascinante como inquietante. Nos cuentan que pueden lanzarse mediante diferentes mecanismos, desde catapultas hasta cohetes, mostrando una versatilidad sorprendente en el campo.
El comandante Brad Cooper ha dejado claro que esta innovación se utiliza como una herramienta disuasoria. Al equipar a nuestros valientes combatientes con tecnología punta, están enviando un mensaje fuerte a quienes podrían tener malas intenciones: «No estamos aquí para jugar». La pregunta es: ¿realmente esto detendrá a los actores malignos o solo complicará más la situación? El tiempo lo dirá.

