Imagina no poder caminar tras haber sufrido un ictus. Cada año, alrededor de 120.000 personas en España se enfrentan a esta dura realidad. Un ictus, ese ladrón silencioso del movimiento, puede dejar secuelas devastadoras. Sin embargo, la esperanza llega de la mano de Robopedics, una startup española que ha creado Awake, un innovador dispositivo biónico unilateral diseñado para ayudar a quienes han perdido la movilidad en una pierna.
La historia detrás del avance
A veces, las mejores ideas nacen de las experiencias más dolorosas. Iván Ramírez, fundador de Robopedics, comenzó este proyecto por amor a su padre, quien había sufrido un ictus y perdió el uso de una pierna. Al ver lo complicado que era encontrar soluciones adecuadas para aquellos que solo necesitan asistencia en una extremidad, decidió poner manos a la obra. En su trastero y sin muchos recursos, Iván empezó a dar forma al Awake.
Con un peso de 6,5 kilos y dotado de tecnología avanzada basada en Raspberry Pi, este dispositivo permite a los usuarios volver a andar con mayor facilidad. Integra una pierna biónica asistida y un bastón inteligente que controla su funcionamiento desde una aplicación móvil o directamente desde el propio bastón. Además, cuenta con cinco horas de autonomía y es accesible para personas entre 1,60 y 1,90 metros de altura.
Pese a que los exoesqueletos tradicionales pueden superar los 100.000 euros, Awake se ofrece aproximadamente por unos 15.000 euros. Aunque aún está en fase de ensayos clínicos para obtener certificación médica y no estará disponible hasta mediados del próximo año si todo va bien.
Aunque el camino ha sido largo y lleno de obstáculos —incluso tuvo que parar temporalmente debido al fallecimiento de su padre— Iván ha logrado formar un equipo con Dionís Guzmán y Marc Serra para llevar este sueño adelante. Ahora tienen ante sí la posibilidad real de devolver la movilidad a muchas personas.
Cada paso cuenta cuando se trata de recuperar algo tan fundamental como caminar. Con avances como el Awake, se vislumbra un futuro donde los ictus ya no signifiquen el final del movimiento para tantos afectados.

