Estamos en un momento crucial para el Mallorca, con dos enfrentamientos que pueden cambiarlo todo. Primero, tenemos a Osasuna en casa, un partido que se presenta como una verdadera final si los bermellones quieren alejarse de la zona de peligro. La situación de los navarros no es la mejor, así que es la oportunidad perfecta para sacar provecho y conseguir esos puntos tan necesarios.
El cuerpo técnico, liderado por Jagoba Arrasate, ha marcado estos dos encuentros en rojo. Necesitan dar un golpe sobre la mesa y demostrar que están aquí para luchar por la permanencia. Con solo 12 puntos en su haber, el Mallorca está al borde del abismo y cada encuentro cuenta más que nunca.
Un Osasuna tambaleante y un Oviedo en apuros
Afrontar a Osasuna este sábado en Son Moix es vital; su situación actual es complicada y hay dudas sobre cómo responderán. Sin embargo, si logramos ganarles, nos rebasarán en la tabla con 15 puntos frente a sus 12 actuales. Pero esto no se acaba aquí; después viene el Oviedo, colista de la categoría con solo 9 puntos. El equipo asturiano ha cambiado de entrenador buscando revertir su suerte, pero hasta ahora no han encontrado el camino.
Tanto contra Osasuna como contra Oviedo, el Mallorca tiene una gran ocasión para despegarse de esos equipos que luchan por evitar el descenso. La afición lo siente y sabe que es hora de apretar los dientes y luchar por esos tres puntos que tanto necesitamos.

