PALMA. FEMINISMO. VIOLENCIA DE GÉNERO. VIOLENCIA MACHISTA. El feminismo toma las calles, y Mallorca no se queda atrás en esta batalla crucial para erradicar la violencia contra la mujer. Con el Día Internacional para la Eliminación de la Violencia contra la Mujer a la vuelta de la esquina, las calles de Palma se preparan para vibrar con dos manifestaciones que prometen ser un grito unido y potente.
Dos caminos, una misma lucha
Este próximo 25 de noviembre, a las 18:30 horas, se darán cita dos marchas organizadas por diferentes colectivos que, aunque separadas, comparten un mismo objetivo: visibilizar el problema de la violencia machista. La primera será impulsada por el Moviment Feminista de Mallorca, que comenzará su recorrido en la plaza de España y avanzará por la avenida Alemanya hasta llegar a la plaza del Tub, donde se leerá un manifiesto cargado de exigencias y esperanzas.
La otra movilización, organizada por la Coordinadora Transfeminista de Mallorca, también comenzará a las 18:30 desde la plaza Porta Pintada, recorriendo varias calles hasta desembocar en la plaza de Cort, donde igualmente habrá lectura de un manifiesto. Su lema es claro: ‘Combate la violencia machista, milita feminista’, y su enfoque radica en hacer frente al alarmante aumento de los discursos de odio y el repunte de agresiones hacia las mujeres.
Ambos grupos están unidos en una causa que trasciende fronteras; lo han definido como un fenómeno global que afecta especialmente a los hombres jóvenes. Aseguran que esta reacción violenta surge como respuesta a los avances feministas y es alimentada por influencias digitales cada vez más peligrosas.
No podemos ignorar cómo desde ciertos sectores políticos se intenta señalar enemigos y dividir a nuestra sociedad con falacias. La Coordinadora ha lanzado una dura crítica hacia quienes buscan retroceder en los derechos alcanzados por las mujeres, intentando reinstaurar roles tradicionales que relegan a nuestras compañeras a un modelo obsoleto y opresor.
Así que este 25N saldremos a las calles con fuerza, porque no se trata solo de una jornada más; es un recordatorio potente e ineludible: estamos aquí para luchar juntos contra cualquier forma de violencia machista y reivindicar nuestros derechos.

