En abril de 2026, Palma se prepara para recibir la Art Cologne Mallorca, una versión renovada de la famosa feria de arte que acaba de hacer su parada en Colonia. Daniel Hug, su director artístico, no puede ocultar su satisfacción tras el éxito del evento en Alemania y, sobre todo, por el creciente interés que están mostrando las Baleares. «Palma ha cambiado tanto desde la última vez…», confiesa con nostalgia.
Un nuevo aire para la feria
Aquella primera edición en 2007 fue pequeña y encantadora, pero quizás no estuvo en el lugar correcto. Sin embargo, los expositores quedaron contentos con sus ventas. Desde entonces, Hug ha asumido un papel clave y ha llevado a cabo una labor consciente; ahora busca asociarse estrechamente con galerías locales. «No tengo interés en hacer aquí solo una feria alemana», afirma contundente.
La nueva propuesta implica un fuerte componente local: se contratarán empresas mallorquinas para toda la logística necesaria. En total, habrá hasta 25 galerías alemanas entre los expositores, mientras que el resto estará compuesto por artistas españoles e internacionales.
El Palacio de Congresos será el escenario principal y aunque ofrece menos espacio que el recinto ferial alemán –un reto logístico– promete ser un recorrido atractivo lleno de luz natural y vistas al mar. La idea es crear una experiencia única donde la venta de arte sea solo una parte del evento.
Hug también destaca el gran interés que han mostrado coleccionistas internacionales, especialmente desde Estados Unidos y Escandinavia. Cada vez son más las personas que ven a Mallorca como su segundo hogar; «Es sorprendente cómo se habla tanto sobre la isla en medios estadounidenses», apunta.
No es casualidad que este desembarco coincida con la candidatura de Palma como Capital Europea de la Cultura 2031. Para Hug, esto añade un plus a la feria: «Podemos establecerla rápidamente aquí».

