En un giro inesperado de los acontecimientos, una mujer ha sido condenada por un juzgado penal de Palma a un año de prisión tras reconocer su participación en la extorsión a una pareja que nunca había conocido. Todo comenzó en agosto del año pasado, cuando esta historia aterradora se desató.
Las víctimas recibieron mensajes amenazadores que les exigían dinero. Asustados y sin saber qué más hacer, decidieron ceder ante el miedo: le enviaron dos bizums de 500 euros cada uno, temiendo que las amenazas se convirtieran en realidad. La abogada de la acusada, Melanie Mesquida, logró un acuerdo con la Fiscalía y así la pena quedó suspendida durante dos años. Pero ojo, esto no significa que se libre del todo; deberá indemnizar a los afectados con 125 euros al mes durante este tiempo para cubrir una responsabilidad civil total de 3.000 euros.
Un mensaje aterrador y el miedo que perdura
Todo ocurrió el 13 de agosto alrededor de la medianoche. Uno de los afectados recibió un inquietante mensaje desde un número dominicano: si no pagaban 1.500 euros, él y su pareja correrían grave peligro. Aunque al principio se mostró reacio a pagar, pronto recibió otro mensaje desde un número español relacionado con la procesada. Esta vez le pedían solo 1.000 euros, y el hombre terminó accediendo, enviando los bizums desde el móvil de su mujer.
Poco después el acoso continuó; volvieron a bombardearle con mensajes extranjeros exigiendo nuevamente la suma inicial. En su desesperación, bloqueó esos números, pero antes recibió algo aún más perturbador: un vídeo donde se veía cómo asesinaban a alguien y unas palabras escalofriantes: iban a hacer lo mismo con él y su pareja.
El impacto psicológico fue brutal para esta pareja; comenzaron a temer salir de casa e incluso afectó a su pequeña hija. Este viernes, la procesada reconoció ser culpable de extorsión y aceptó lo establecido por el juez en una sentencia pronunciada directamente.

