MADRID, 11 de septiembre. Nicolás Maduro, el presidente de Venezuela, ha dado un paso adelante este jueves al anunciar el inicio formal de un ambicioso plan que llama «ofensiva permanente». Este movimiento busca activar las Fuerzas Armadas del país en un contexto donde la tensión política y militar con Estados Unidos parece estar alcanzando nuevas cotas. Durante un evento que tuvo lugar en las primeras horas del día, Maduro afirmó: «Los mares, tierras y montañas le pertenecen al pueblo de Venezuela, jamás le pertenecerán al imperio norteamericano». Su discurso resonó entre los presentes y dejó claro su mensaje: la defensa del territorio nacional es innegociable.
Un llamado a la movilización nacional
En compañía del ministro de Defensa, Vladimir Padrino López, el mandatario aseguró que los venezolanos estarán listos para defender su patria «a la hora que sea, cuando sea y para lo que sea». Este ‘Plan Independencia 200’ incluye la activación de 284 frentes estratégicos repartidos por todo el país. La consigna es clara: “Debemos tener nuestras costas libres de imperialistas y grupos violentos”, enfatizó Maduro con determinación.
Aunque no ofreció muchos detalles sobre cómo se llevará a cabo esta nueva operación, sí enmarcó sus acciones dentro de una estrategia más amplia para garantizar la paz en Venezuela. Para ello, su gobierno también ha comenzado jornadas de alistamiento para la Milicia Bolivariana. En este contexto tan tenso, los líderes chavistas han hecho hincapié en la unidad nacional como respuesta a la creciente presencia militar estadounidense en la región y ante hechos recientes como el bombardeo a una supuesta narcolancha en aguas caribeñas que dejó once muertos según fuentes estadounidenses.