En Vallecas, donde el fútbol se siente en cada rincón, se vivió un episodio inesperado durante el partido entre el Rayo y el FC Barcelona. Tras el pitido final, y con la adrenalina aún en el aire, algunos pequeños aficionados pidieron a sus ídolos las camisetas que llevaban puestas. Pero lo que debería haber sido un momento mágico se tornó en un fiasco cuando desde la grada escucharon voces amenazantes: «Aquí no se dan camisetas…». Esas palabras cortaron de raíz los sueños de muchos niños.
La búsqueda de los pequeños aficionados
Ahora, el Rayo Vallecano ha decidido tomar cartas en el asunto. Según fuentes cercanas al club, han estado trabajando arduamente para localizar a esos niños que quedaron sin su tan ansiada camiseta del Barça. No es solo un pedazo de tela; es un recuerdo imborrable de un momento especial, algo que todo niño merece tener.
Mientras tanto, los servicios jurídicos del club examinan las imágenes del encuentro para identificar al responsable de esa escena lamentable y así poder actuar en consecuencia. Raúl Martín Presa, presidente del Rayo, no pudo contener su indignación ante lo ocurrido: «Son situaciones bochornosas. Los jugadores del Barça quisieron darles una camiseta con cariño y respeto, ¿y así se lo agradecemos?».
Las palabras de Presa resuenan fuerte: todos hemos sido niños alguna vez y recibir una camiseta de un jugador profesional es una experiencia inolvidable. La comunidad rayista está lista para demostrar que Vallecas no es sinónimo de hostilidad; aquí hay pasión por el fútbol y amor por nuestros jóvenes aficionados.