Marcel Granollers ha escrito un nuevo capítulo en su historia tenística. El barcelonés, acompañado por su compañero Horacio Zeballos, se ha ganado un lugar en la final de dobles del US Open, y lo ha hecho tras superar a Robert Cash y J.J. Tracy con un marcador de 6-3, 3-6 y 6-1. Esta es nada menos que su séptima final de Grand Slam, y la quinta junto a Zeballos.
Una recuperación admirable
Granollers no lo ha tenido fácil. Después de sufrir una rotura en el pie durante los cuartos de Wimbledon, muchos pensaron que sus aspiraciones se habían desvanecido. Pero él demostró que la adversidad no le detiene. A pesar de ausentarse de los Masters 1000 en Toronto y Cincinnati para recuperarse, su espíritu competitivo sigue intacto.
El próximo desafío será enfrentarse nuevamente a los británicos Skupski y Salisbury, quienes ya conocen el sabor amargo de la derrota contra este dúo hispano-argentino, pues fueron ellos quienes les eliminaron en París. La historia nos dice que Granollers sabe lo que es estar en finales complicadas; ya lo vivió antes en 2019 cuando luchó con Zeballos contra los colombianos Juan Sebastián Cabal y Robert Farah.
A sus 39 años, Marcel sigue demostrando que tiene mucho tenis por delante. Y no solo eso; también ha sido convocado para representar a España en la próxima serie de Copa Davis contra Dinamarca, programada para los días 13 y 14 de septiembre en Marbella.