El pasado jueves, a media mañana, un grupo de senderistas se encontró con una situación alarmante en el famoso Torrent de Pareis. Un hombre alemán de 70 años sufrió un golpe de calor que lo obligó a detener su caminata, dejando a todos preocupados. A medida que el sol arreciaba y las temperaturas subían, él comenzó a sentirse agotado. Sus compañeros no dudaron y dieron la voz de alarma.
Intervención rápida para evitar lo peor
El servicio de Emergencias del 112 recibió la llamada y rápidamente activó al helicóptero del Servicio Aéreo de la Guardia Civil, junto con los valientes del GREIM (Grupo de Rescate e Intervención en Montaña). La edad del excursionista y las condiciones complicadas del terreno hacían temer lo peor. En cuestión de minutos, el equipo llegó al lugar y comenzó a sobrevolar la zona hasta localizarlo, acompañado por otro integrante del grupo que también se encontraba en apuros.
Las altas temperaturas exigieron una intervención inmediata. Con una grúa, lograron evacuar tanto al afectado como a su compañero, garantizando su seguridad. Mientras tanto, los agentes proporcionaron los primeros auxilios antes de trasladarlo hacia donde tenían aparcados los vehículos. El resto del grupo continuó su excursión bajo la atenta mirada del guía, quien permanecía conectado con los servicios de emergencia para asegurarse de que todo estuviera bajo control.
La Guardia Civil aprovechó esta ocasión para recordarles a todos sobre la importancia de tomar precauciones cuando nos aventuramos por el medio rural durante el caluroso verano español. Evitar salir en las horas más cálidas del día, resguardarse del sol y suspender cualquier actividad ante signos claros de agotamiento son claves para disfrutar sin riesgos.