Las cifras son asombrosas y hablan por sí solas: 1.409.000 euros incautados, 13 registros y 15 detenciones. Pero si eso no fuera suficiente, las imágenes del operativo conjunto de la Policía Nacional y la Guardia Civil, que se desató el pasado lunes, cuentan una historia aún más impactante. Este macro dispositivo tenía como objetivo desmantelar una trama criminal que involucraba a personajes tan notorios como el abogado Gonzalo Márquez, el cabecilla de los ‘United Tribuns’, Stefan Milojevic, y el inspector de Policía Nacional Faustino Nogales; todos ellos ya tras las rejas.
Un operativo digno de película
Los documentos audiovisuales revelan escenas que parecen sacadas de una película: esconder un millón de euros en un trastero o tener armas ocultas en bolsas. Imagínate escuchar el grito de ‘¡Policía!’ mientras irrumpen en un chalet lujoso para realizar detenciones. Todo comenzó con la captura de un camionero en el Puerto de Valencia que transportaba 675 kilos de cocaína, una cifra alarmante que encendió la mecha del operativo. Desde Baleares, esta organización tenía la capacidad para inundar todo Europa con su mercancía.
A las primeras horas del lunes, 15 personas fueron arrestadas durante un despliegue nocturno que buscaba aprovechar el efecto sorpresa y evitar cualquier intento de ocultar pruebas o avisos sobre lo que iba a ocurrir. Mientras muchos guardamos nuestras bicicletas y cosas olvidadas en casa, otros almacenaban fortunas: uno de los detenidos tenía nada menos que 1.261.200 euros escondidos en su trastero.
Eran como una mafia moderna; algunos tenían escopetas en casa y no salían sin sus pistolas. Los agentes encontraron hasta cuatro armas reales con munición y silenciadores. Y es que entre los arrestados estaba Stefan Milojevic, hijo del exjugador del Real Mallorca Goran Milojevic, quien había sido condenado previamente por delitos graves pero seguía al mando de esta oscura trama desde su sede en Palma.
Márquez no era menos; movía hilos a su antojo como abogado defensor hasta para los propios miembros condenados del grupo criminal. En sus propias palabras, querían llenar las Islas Baleares de droga y habían conseguido hacerse con el monopolio mediante amenazas y robos a la competencia.
El lunes fue revelador: se encontraron 11 kilos de cocaína y 2 kilos más de hachís.
Aunque este impresionante operativo ha llegado a su fin, fuentes cercanas advierten sobre posibles conexiones criminales adicionales entre los detenidos que podrían destapar nuevos casos sorprendentes.