En una jugada histórica, el Tribunal Constitucional de Bolivia ha dejado claro este lunes que a partir de las elecciones de 2030, la paridad de género será no solo un deseo, sino una obligación. El magistrado Yvan Espada, con voz firme y decidida, explicó que si un hombre se postula para la Presidencia, entonces debe haber una mujer ocupando la Vicepresidencia, y viceversa. Esto es más que una simple norma; es un grito por igualdad y reconocimiento.
Una reivindicación necesaria
Este fallo no ha llegado por casualidad. Todo comenzó cuando el diputado Israel Huatari hizo hincapié en que no basta con aplicar la paridad solo en la Asamblea Legislativa; esto debe extenderse al binomio presidencial. La respuesta del tribunal fue clara: las mujeres tienen derecho a estar presentes en todos los espacios donde se toma decisiones importantes.
A pesar del entusiasmo por este avance, hay que tener en cuenta que esta medida no se aplicará a las elecciones venideras del 17 de agosto. ¿La razón? No queremos entorpecer el proceso electoral actual. Pero lo cierto es que este es un paso importante hacia adelante en la lucha por la igualdad de derechos en Bolivia.