MADRID, 27 Jul. (EUROPA PRESS) – Este domingo, las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) han dado un paso que podría cambiar un poco la situación en la desgastada Franja de Gaza. Han anunciado el inicio de unas «pausas humanitarias» de diez horas, una medida que busca facilitar la entrega de ayuda a quienes más lo necesitan. El ejército israelí ha declarado que estas pausas se llevarán a cabo diariamente desde las 10:00 hasta las 20:00 horas, permitiendo así el movimiento tranquilo de organizaciones humanitarias.
Una decisión esperada entre críticas
El anuncio ha llegado después de intensas críticas internacionales sobre la crítica situación humanitaria en Gaza, donde ya se han reportado más de 120 muertes por hambre y desnutrición desde que comenzó la ofensiva militar tras los ataques del 7 de octubre. En su comunicado, el ejército explica que estas pausas no son solo una cuestión logística, sino también una respuesta a la presión externa para demostrar que no están llevando a cabo una política deliberada de hambruna.
Además, han establecido «rutas seguras permanentes» para asegurar el tránsito seguro de los convoyes humanitarios entre las 06:00 y las 23:00 horas. Según ellos, esto es fundamental para garantizar que alimentos y medicamentos lleguen a los habitantes del enclave.
El presidente Isaac Herzog ha respaldado esta medida y ha instado a la ONU y otras ONG internacionales a colaborar con Israel en este esfuerzo vital. Ha enfatizado que es totalmente «inaceptable» que la ayuda destinada a Gaza sea interceptada o no distribuida correctamente. Asegura que su gobierno está haciendo todo lo posible para mejorar y modernizar la respuesta humanitaria.
Sin embargo, este gesto no logra borrar completamente las sombras de dudas sobre intenciones reales y efectividad. A pesar del respaldo oficial, muchos se preguntan si estas medidas serán suficientes para mitigar el sufrimiento diario de miles de personas atrapadas en esta crisis interminable.