MADRID, 25 Jul. (EUROPA PRESS) – Este domingo, Escocia se convertirá en el escenario de un encuentro que podría cambiar las reglas del juego entre Europa y Estados Unidos. La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, se reunirá con el presidente norteamericano, Donald Trump, justo antes de que expire el ultimátum lanzado por este último. El 1 de agosto está a la vuelta de la esquina y, con él, la amenaza de aranceles generalizados sobre productos europeos si no se llega a un acuerdo.
En una nota publicada en su cuenta de X, Von der Leyen ha compartido que tras una «buena» llamada telefónica decidió concretar este importante encuentro. Ambos líderes tienen mucho que discutir: «las relaciones comerciales transatlánticas y cómo reforzarlas», según palabras de la propia presidenta.
Una oportunidad única
Antes de cruzar el charco hacia Escocia, Trump dejó claro que ve a la Unión Europea como un terreno fértil para alcanzar ese ansiado acuerdo comercial. Durante una rueda de prensa afirmó: «Creo que tienen una oportunidad muy buena de alcanzar un acuerdo». Y no es para menos; hay “mucho dinero” en juego. Así lo recalcó ante los periodistas, subrayando la importancia económica detrás del diálogo.
Además, Olof Gill, portavoz comunitario de Comercio, también se mostró optimista al señalar que están más cerca que nunca de alcanzar un entendimiento favorable gracias a los intensos contactos técnicos y políticos diarios.
No olvidemos que cuando Trump lanzó su ultimátum el pasado 13 de julio, Von der Leyen respondió con posibles represalias económicas dejando todo en suspenso hasta después del 1 de agosto para buscar una salida negociada. En este sentido, la Unión Europea ya ha avanzado en preparar medidas sobre compras estadounidenses valoradas en 93.000 millones de euros como respuesta si las negociaciones no fructifican.