En medio de la adrenalina del Gran Premio de Bélgica, Fernando Alonso no se detiene ante los obstáculos. A pesar del Sprint y de la lluvia que amenaza el circuito de Spa, el asturiano tiene una misión clara: probar las últimas mejoras para su AMR25. Este jueves, mientras entraba al circuito, dejó claro que lo más importante es entender esas nuevas piezas que prometen rendimiento.
¿Desconcertados o estratégicos?
Las dudas comenzaron a surgir hace tres semanas cuando Andy Cowell, el team principal, sugirió que sería lo último en tecnología. Pero Alonso no se deja llevar por esos juegos mentales. “La prioridad es entenderlas”, comentó con sinceridad. Sabía que un fin de semana complicado como este, con el clima jugando en contra, solo añade presión a la tarea de asimilar las novedades.
Aunque algunos cuestionaron la elección de este fin de semana para introducir cambios, él ve el vaso medio lleno: “Para el equipo esto no es lo importante; están trabajando a tope para traernos piezas tan pronto como están listas”. Y aunque quizás no se logre sacarles todo el provecho ahora, confía en que serán útiles en Budapest y más allá.
Fernando también compartió su gratitud hacia su equipo por su esfuerzo constante. “Puede que no probemos todo durante las prácticas”, reflexionó sobre la posibilidad de lluvia durante los Libres 1. Sin embargo, considera que esta primera parte del fin de semana puede servir como test previo antes del Sprint.
A medida que avanzamos hacia la segunda mitad del año, Alonso está listo para mantener la competitividad tras cuatro carreras cosechando puntos y cerca siempre de entrar a Q3. Aunque mira hacia 2026 con ambición: “El 80% del foco está ya en ese año”. Para él y sus compañeros pilotos –salvo McLaren– todos sueñan con una buena temporada futura.
Y hablando del circuito belga, dijo: “No creo que sea un gran reto; hemos dado más vueltas en mojado aquí que en seco”. Con esa confianza típica de quien conoce cada curva como la palma de su mano, parece estar preparado para cualquier desafío climático.
Finalmente, subrayó la importancia del trabajo físico: “Hoy los coches son bastante fáciles desde el punto físico; eso les da ventaja a los jóvenes”. Pero nos recuerda que nunca hay que subestimar el esfuerzo detrás del volante.