En una jugada que muchos celebran, el gobierno español ha mostrado su respaldo a la llegada del nuevo canal de RTVE en català a las Islas Baleares. La iniciativa, impulsada por Plataforma per la Llengua, busca que esta propuesta no se quede solo en palabras y finalmente podamos disfrutar de una televisión pública que refleje nuestra identidad.
Un clamor popular por el idioma
No es un secreto que el catalán es parte de nuestra vida diaria. Con cada vez más voces alzándose para reivindicar su espacio, desde el boínder menorquí hasta los jóvenes que navegan en un mar de anglicismos, está claro que necesitamos un cambio. En este contexto, ¿cómo no celebrar que nuestros políticos tomen cartas en el asunto?
Aunque hay quienes todavía se resisten a aceptar esta realidad, como el diputat de Vox, Jorge Campos, quien afirmó con rotundidad: «A Mallorca parlam mallorquí i espanyol». Esto nos lleva a preguntarnos si realmente estamos listos para abrazar nuestra diversidad lingüística o si seguiremos anclados en ideas retrógradas.
Mientras tanto, iniciativas como la futura Casa de les Lletres o documentales sobre la historia republicana nos demuestran que hay esperanza. Es momento de dejar atrás el monocultivo turístico y abrirnos a una sociedad más plural y rica en matices. Si queremos construir un futuro mejor para todos, debemos hacerlo juntos y sin miedo a expresar quiénes somos realmente.