En el corazón de Wimbledon, un joven de 18 años se prepara para dejar su huella. Andrés Santamarta Roig, el nuevo número 1 del mundo en categoría júnior, llega con grandes expectativas y un sueño por cumplir: seguir los pasos del fenómeno Carlos Alcaraz. Este talentoso valenciano ha conquistado la cima del circuito júnior y ahora tiene la mirada fija en el prestigioso torneo londinense.
Un camino fulgurante hacia la gloria
Desde sus inicios en Valencia, Andrés ha demostrado que tiene lo que se necesita para destacar. Con victorias en competiciones clave como la Orange Bowl y el Eddie Herr, su ascenso ha sido meteórico. No es solo una racha de suerte; su dedicación le ha llevado a ser cabeza de serie en Roland Garros 2025, donde llegó hasta octavos de final. En este momento, ocupa el puesto 698 en el ranking ATP y ya acumula más de 8.100 euros en ganancias, ¡y eso es solo el principio!
Con confianza renovada tras superar al británico Brady en su primer partido, se enfrenta este martes al esloveno Sesko. ¿Podrá dar otro paso hacia la consagración? Su estilo agresivo y esa garra que lo diferencia son sus armas más potentes. «Siempre salgo muy motivado», cuenta Andrés; aunque reconoce que a veces necesita controlar esa adrenalina para evitar deslices durante los partidos.
El entorno también juega un papel crucial en su carrera. Formado en clubes locales y ahora entrenando en GTennis, Andrés destaca la importancia del apoyo que recibe: «Me siento respaldado y eso es fundamental». La estabilidad fuera de las pistas le permite concentrarse plenamente en cada desafío.
Aunque no tiene un ídolo específico, Rafa Nadal siempre está presente como fuente de inspiración: «Es un ejemplo para España y todo el mundo del tenis». Con esa mentalidad aguerrida y una incansable ética de trabajo, Santamarta está listo para abrirse camino entre los mejores.
Este martes será decisivo para él frente a Sesko; independientemente del resultado, todos los ojos estarán puestos sobre esta joven promesa del tenis español que ya ha demostrado tener talento suficiente para llegar lejos. En Wimbledon 2025, Andrés busca escribir otro capítulo emocionante de su historia y acercarse aún más al legado dejado por Alcaraz.