En un giro sorprendente de los acontecimientos, la Policía Nacional ha puesto tras las rejas a dos jóvenes de apenas 19 años en la provincia de Las Palmas. ¿El motivo? Su presunta participación en un caso grave de ciberterrorismo que nos deja helados. Todo comenzó cuando los agentes se percataron de que unos datos personales, más que delicados, estaban dando vueltas y afectando a importantes instituciones del Estado.
Según las investigaciones, esta filtración impacta directamente a personajes como Pedro Sánchez, miembros del Gobierno central y autonómico, así como a profesionales del ámbito periodístico. Los arrestados no solo publicaban estos datos; se jactaban de su poder para venderlos, lanzando mensajes amenazantes sobre futuras revelaciones. Pero, ¿de dónde sacaron toda esa información tan sensible?
Una banda audaz llamada ‘Etarras’
Parece que estos chicos formaban parte de una pandilla autodenominada ‘Etarras’. Utilizaban una botnet, es decir, una red de dispositivos infectados con malware controlados remotamente por un ciberdelincuente. Con este método lograron acceder a nombres, direcciones y hasta números de DNI. Uno de ellos incluso se atrevió a dar una entrevista en Twitch donde explicaba sin tapujos: «Con un bot que tengo he conseguido todo. Yo saco bases de datos y las indexo para que cualquiera pueda acceder si compra el bot».
El Instituto Nacional de Ciberseguridad (INCIBE) aclara que estas botnets son grupos de ordenadores infectados, usados para realizar ataques maliciosos desde lejos. Si tu dispositivo empieza a fallar o muestra comportamientos extraños como luces encendidas sin razón aparente, ¡ojo! Podrías ser víctima también.
La Policía no ha tomado esto a la ligera; al arrestarles realizaron registros en sus domicilios y encontraron varios dispositivos técnicos sospechosos. La gravedad de los datos comprometidos convierte esta situación en una amenaza real para la Seguridad Nacional.
A medida que avanza la investigación, nos queda claro que hay mucho más por descubrir detrás de esta historia inquietante.