En el Gran Premio de Austria, Lewis Hamilton no pudo ocultar su descontento. A pesar de que su equipo, Ferrari, cosechó el mejor resultado colectivo de la temporada con Charles Leclerc en tercer lugar y él mismo ocupando el cuarto, el británico dejó claro que sus expectativas son mucho más altas. Después de cruzar la meta a casi diez segundos del monegasco, no dudó en expresar su frustración.
Una mejora que sabe a poco
«Creo que hemos avanzado», comentó Hamilton tras la carrera. Sin embargo, lo hizo con un matiz: «La mejora fue tan pequeña que realmente no sabíamos si había habido cambios significativos». Es cierto que este fin de semana ha sido más positivo comparado con otros anteriores, pero el piloto sigue sintiendo una brecha grande con los líderes. «Ver al equipo mejorar es genial, pero estoy aquí para competir por victorias», añadió.
En un tono reflexivo y autocrítico, Hamilton reconoció que necesita trabajar en su ritmo: «Perder nueve segundos respecto a Charles es inaceptable. Eso es lo que debo corregir». Así, aunque celebró los pequeños avances del equipo, su mirada estaba fija en alcanzar un nivel superior.
A medida que avanza la temporada, las palabras del heptacampeón resuenan entre los aficionados: todos esperan ver al verdadero Hamilton luchando por las primeras posiciones. La pregunta ahora es si podrá dar ese salto antes de finalizar el campeonato.