La madrugada del domingo dejó un mal sabor de boca en Palma. En la Soledat, un hombre que circulaba tranquilamente en su patinete eléctrico fue arrollado por un coche cuyo conductor, sin pensarlo dos veces, decidió huir del lugar como si nada. Pero aquí no acaba la historia.
Un accidente que no puede quedar impune
El atropello ocurrió alrededor de las cuatro de la mañana en la intersección entre las calles Fornaris y Cabrera. La víctima quedó tendida sobre el asfalto, malherida y con la necesidad urgente de asistencia médica. Los sanitarios del Servei d’Atenció Mèdica Urgent (Samu-061) llegaron rápidamente para atenderlo y lo trasladaron al hospital Son Espases.
Mientras tanto, los agentes de la Policía Local de Palma no tardaron en hacerse eco del incidente y comenzaron una investigación para dar con el autor del atropello. Poco después, recibieron información sobre un Seat Ibiza blanco, abandonado en la calle Felicià Fuster, justo frente al Palacio de Congresos, con la luna delantera rota por el impacto. Era evidente que este era el vehículo involucrado.
Ahora, los policías están tras la pista del propietario y el conductor responsable de este acto irresponsable. ¿Dónde está esa persona que prefirió escapar antes que asumir las consecuencias? Este tipo de comportamientos no pueden quedarse impunes. Todos tenemos derecho a transitar nuestras calles con seguridad.