Las Fuerzas Armadas de Irán han alzado la voz este jueves, lanzando una clara advertencia a Estados Unidos. Si se involucran en el conflicto con Israel, aseguran que recibirán «duros e irreparables golpes». Y todo esto surge tras las recientes declaraciones del presidente Trump, quien ha insinuado su posible apoyo a Israel en medio de una escalada de ataques que comenzaron el 13 de junio.
Una respuesta contundente
«Advertimos al criminal Estados Unidos que cualquier entrada directa en esta guerra provocará su propagación por toda la región», ha manifestado el Mando de Jatam al Anbiya, instando a Washington a pensar dos veces antes de dar un paso en falso. Se siente la tensión en el aire; los iraníes están decididos a dar una respuesta «aplastante y precisa» a lo que consideran agresiones estúpidas y maliciosas por parte de Israel.
El comandante Abdolrahim Musavi ha ido más allá, prometiendo ataques incesantes contra cualquier objetivo del «régimen sionista invasor». No se esconden detrás de palabras rebuscadas; ellos afirman abiertamente que no hay límites para sus acciones. La Guardia Revolucionaria iraní se muestra orgullosa de sus capacidades y está lista para actuar con firmeza.
Mientras tanto, Trump sigue jugando al misterio sobre su implicación en este conflicto: «Puede que lo haga o puede que no. Nadie sabe qué voy a hacer», lanzó con cierto desdén el miércoles pasado, dejando entrever que la situación podría escalar aún más.
A día de hoy, las cifras son alarmantes: más de 224 muertos y miles de heridos en Irán tras los bombardeos israelíes. En contraposición, al menos 24 israelíes han perdido la vida debido a los ataques iraníes como represalia. Sin duda, estamos ante un escenario donde las palabras podrían convertirse fácilmente en acciones devastadoras.