El pasado fin de semana, un héroe de cuatro patas demostró que el amor por la familia puede ser más grande que cualquier temor. En Morovia, California, un perro de 16 años se convirtió en el guardián de su hogar cuando un oso curioso decidió hacer una visita no muy cordial. Era pasada la medianoche y el silencio de la noche fue roto por ruidos extraños que hicieron saltar las alarmas del can. Las cámaras de seguridad captaron todo: un enorme oso merodeando en el patio trasero, buscando comida.
La valentía en acción
Sin pensarlo dos veces, este valiente peludo salió corriendo hacia la cocina para hacer frente al intruso. A pesar de ser significativamente más pequeño que el oso, no dudó ni un instante en ladrarle con todas sus fuerzas para ahuyentarlo. ¡Qué espectáculo! Ni siquiera el zarpazo del oso asustado logró frenar su determinación. Al final, ese enorme animal optó por darse a la fuga ante la tenacidad del perro.
Todo esto ocurrió bajo la atenta mirada de Zoë Cadman, la dueña del hogar, quien solo pudo contemplar lo sucedido con una mezcla de miedo y asombro. Por suerte, solo hubo algunos desperfectos en la puerta trasera y nadie resultó herido. Ahora, el Departamento de Pesca y Vida Silvestre está investigando este peculiar incidente. Parece ser que el visitante era uno de esos osos rehabilitados y liberados recientemente en la naturaleza; llevaba un collar GPS para seguir sus movimientos.