Las temidas llamadas spam han sido un verdadero quebradero de cabeza para muchos de nosotros. Pero, ¡atención! A partir de este sábado, se pone en marcha una normativa que promete poner fin a este problema que tanto nos molesta. El Gobierno español ha decidido actuar y obligar a las empresas a utilizar un prefijo específico cuando realicen llamadas comerciales. Esto significa que, si no lo hacen, las operadoras tendrán la capacidad de bloquear esas molestas llamadas antes incluso de que lleguen a sonar en nuestro móvil.
Una nueva esperanza contra el acoso telefónico
Este cambio forma parte de una reforma más amplia en la Ley de Servicios de Atención al Cliente. Con esta medida, se habilitarán nuevos prefijos exclusivos para las comunicaciones comerciales. Así, cuando recibamos una llamada de telemarketing, será mucho más sencillo identificarla y decidir si queremos atenderla o dejarla pasar.
Aunque ya desde junio del año pasado había una prohibición general sobre las llamadas comerciales sin consentimiento previo, parece que algunas empresas han encontrado maneras de eludir la norma, argumentando que los usuarios dieron su permiso anteriormente o simplemente olvidaron darse de baja. Pero con la llegada de estos nuevos prefijos, esperemos que las operadoras puedan afinar aún más sus sistemas y detectar automáticamente qué números son realmente comerciales.
A partir del 7 de junio entra también en juego otro par de medidas del Plan Antiestafas. Por un lado, ya no podremos recibir SMS ni llamadas spam provenientes del extranjero que intentan hacerse pasar por números españoles. Esta táctica es tristemente común en los fraudes telefónicos. Y por otro lado, ahora tampoco se podrán realizar llamadas comerciales desde teléfonos móviles nacionales desconocidos para el receptor, lo cual era otra vía muy utilizada por los estafadores.
Así pues, desde esta fecha solo serán válidas las llamadas comerciales realizadas desde numeraciones geográficas o números específicos como los 800 y 900. Todo esto tiene un único propósito: facilitar nuestra vida y ayudar a distinguir mejor cuándo estamos ante una llamada comercial.
A pesar de todo este esfuerzo legislativo, todavía hay un gran camino por recorrer: el Ministerio para la Transformación Digital ha revelado que actualmente se bloquean alrededor de 235.000 llamadas y 10.000 SMS cada día. Óscar López, ministro responsable del área digital, ha afirmado que en solo dos meses desde la implementación del Plan Antiestafas se han bloqueado más de 14 millones de intentos fraudulentos: «Estamos abordando un problema creciente y estas cifras demuestran que vamos por buen camino».
Aunque estas medidas son un avance importante hacia un entorno telefónico más seguro, aún queda trabajo por hacer. En unos meses veremos la creación de una base oficial donde se registrarán los códigos utilizados por empresas para enviar mensajes SMS; esto ayudará a verificar quién está detrás realmente cada comunicación.
Así que crucemos los dedos y esperemos que esta vez sí logremos decir adiós definitivo a esas insoportables interrupciones telefónicas.