El Sevilla FC se despide de la temporada de una manera muy especial. Esta noche, a las 21:00 horas, se enfrentará al Wydad AC en el Estadio Mohammed V de Casablanca. Un encuentro que no solo tiene como objetivo el fútbol, sino también llenar un poco las arcas del club, ya que se espera que deje unos 200.000 euros en ingresos.
La expedición nervionense llegó a Marruecos tras un viaje desde Castellón, y lo hizo después de una dura derrota ante el Villarreal en su último partido liguero. Pero más allá del resultado, este amistoso busca estrechar lazos con un país donde el sevillismo ha ido creciendo a pasos agigantados en los últimos años.
Un rival histórico
El Wydad AC no es cualquier equipo; es el más laureado de Marruecos, con 22 títulos ligueros y tres trofeos de la Liga de Campeones de África. El club acaba de finalizar su liga local y está preparándose para participar en el Mundial de Clubes, donde debutará ante el Manchester City. Además, hay que recordar que aquí comenzó su carrera Yassine Bono, quien dejó huella en el Sevilla y una considerable inyección económica cuando fue traspasado.
A medida que se acerca la hora del partido, surgen sentimientos encontrados entre los aficionados y los jugadores. Tras este encuentro, muchos miembros del equipo comenzarán sus vacaciones, aunque algunos internacionales deberán seguir trabajando con sus selecciones. También será un momento significativo para Joaquín Caparrós, pues este será su último partido al mando del banquillo sevillista mientras se especula sobre quién ocupará su lugar.
Sigue siendo una época llena de incertidumbre para el Sevilla FC. Con muchas incógnitas sobre futuros fichajes y decisiones clave por tomar, esta despedida puede ser tanto un cierre como un nuevo comienzo para todos nosotros.