En un día que quedará grabado en la memoria del automovilismo español, Álex Palou se alzó con el triunfo en las 500 Millas de Indianápolis, convirtiéndose así en el primer piloto español en conseguir este codiciado galardón. Este evento, que celebra su 109 edición, fue testigo de cómo Palou, quien milita en el equipo Chip Ganassi, arrancaba desde la sexta posición para firmar su quinta victoria de la temporada. A sus 28 años, este joven talento ya ha demostrado ser un verdadero gigante de la IndyCar.
Un logro histórico para el automovilismo español
La hazaña no solo es un motivo de celebración personal para Palou, sino que cierra un círculo dorado conocido como la Triple Corona del automovilismo español. Antes de él, otros grandes como Fernando Alonso, Marc Gené y Miguel Molina habían dejado huella en esta disciplina. Alonso, por ejemplo, brilló con sus dos victorias en Montecarlo y sus triunfos en Le Mans. Pero hoy es Álex quien se lleva todos los aplausos.
A medida que cruzaba la línea de meta por delante del sueco Marcus Ericsson, Palou no solo reafirmó su dominio en la pista, sino que también dejó claro que es el gran favorito para hacerse con otro título más. Su actuación va más allá de lo deportivo; es una inspiración para muchos y demuestra que con esfuerzo y determinación se pueden romper barreras. ¡Enhorabuena a Álex!