La madrugada del 17 de mayo se tiñó de preocupación en el sureste de Londres. En un rincón de Thamesmead, un hombre desató el caos y dejó a cinco personas heridas tras apuñalarlas. Todo ocurrió alrededor de las 4:19 horas, cuando la tranquilidad habitual se vio interrumpida por un acto violento que nadie esperaba.
Una búsqueda urgente
Las autoridades británicas no han perdido tiempo y han lanzado una operación para dar con el responsable de este ataque brutal. Aunque los heridos fueron rápidamente trasladados a hospitales, hasta el momento no se han realizado arrestos. Según ha declarado Scotland Yard, “hay una investigación en marcha” y aseguran que mantendrán el cordón de seguridad durante toda la jornada. La sensación entre los vecinos es de inquietud; ¿hasta dónde hemos llegado? En medio de tantas preguntas sin respuesta, lo único claro es que la violencia nunca debería ser la solución.