Una mañana que prometía ser tranquila se transformó en un auténtico caos en la autopista de Andratx. Minutos antes de las 12.00 horas, un coche decidió hacer una acrobacia nada deseada, volcando y quedando en plena vía. Este incidente no solo afectó a los ocupantes del vehículo, sino que también provocó el corte de un tramo de la carretera, generando colas kilométricas a la altura del molino de Santa Ponça, en Calvià.
La reacción inmediata
Varios vehículos se vieron involucrados en este accidente sorprendente. Por suerte, los sanitarios llegaron rápidamente al lugar para atender a los heridos. Afortunadamente, aunque la escena era impactante, ninguno sufrió lesiones graves. Sin embargo, queda esa sensación de inquietud al pensar en lo que pudo haber ocurrido.
A medida que llegaban las ambulancias y los agentes de la Guardia Civil de Tráfico, el ambiente se tornaba más tenso. Los guardias hicieron su trabajo regulando el tráfico y desviándolo por la rotonda del molino mientras intentaban esclarecer las causas del accidente. ¿Qué llevó a esta situación tan peligrosa? Las investigaciones están en marcha.
Este tipo de accidentes nos recuerda lo frágil que puede ser nuestra seguridad al volante y cómo un momento puede cambiarlo todo. Esperamos que todos los implicados se recuperen pronto y aprendamos a manejar nuestras carreteras con mayor cuidado.