BRUSELAS, 14 de mayo. (EUROPA PRESS) – Este miércoles, los Veintisiete han dado luz verde a un nuevo paquete de sanciones contra Rusia, ¡y vaya que no son pocas! Esta es la decimoséptima ronda desde que comenzó la invasión de Ucrania, y entre las medidas destaca un claro mensaje a esa ‘flota fantasma’ que Moscú utiliza para esquivar las restricciones comerciales. La decisión se tomó a nivel de embajadores y se espera que los ministros lo ratifiquen formalmente en su reunión del próximo martes.
Un golpe más fuerte contra el comercio ilegal
Ya sabemos que la UE había impuesto sanciones anteriormente sobre esos buques que Rusia usa para evadir controles europeos en el comercio del petróleo, además de transportar material militar o grano ucraniano robado. Pero ahora, la lista se ha ampliado casi a 200 barcos, incluidos varios petroleros. Según ha explicado la presidencia polaca del Consejo, esto supone un “golpe aún más duro” para quienes intentan burlar las normas.
No solo eso; también se han aprobado nuevas restricciones comerciales que afectan a unas 30 empresas adicionales involucradas en esta evasión de sanciones, enfocándose especialmente en productos de uso dual. Además, hay 75 nuevas sanciones individuales dirigidas a personas y empresas ligadas al sector militar.
Aparte de estas medidas, el nuevo paquete también amplía las llamadas sanciones ‘híbridas’, creando una base legal para atacar a quienes destruyen cables submarinos y aeropuertos. Esto incluye a facilitadores financieros y hasta medios de propaganda que alimentan la desinformación; más de 20 entidades y personas están en la mira.
No podemos olvidar los abusos contra los derechos humanos: el paquete contempla sanciones específicas para 20 jueces y fiscales implicados en casos como los del opositor ruso Alexéi Navalni y el periodista Vladimir Kara Murza. Y como colofón final, se introduce una prohibición sobre la exportación de sustancias químicas usadas para fabricar misiles.