La presentación del nuevo sistema de defensa aérea de China ha dejado a más de uno boquiabierto. Este innovador cañón de 16 tubos es el primero en su clase, diseñado específicamente para hacer frente a los enjambres de drones que acechan desde el cielo. La propuesta no solo se centra en la interceptación, sino que ofrece una barrera efectiva capaz de cubrir cualquier objetivo con precisión, un verdadero salto en la tecnología bélica.
Yu Bin, el cerebro detrás del proyecto, compartió sus impresiones en una entrevista con Modern Weaponry. En sus palabras, este sistema es pionero a nivel mundial: “Tiene una rápida velocidad de recarga y un poder destructivo extraordinario”, aseguró. Pero eso no es todo; también puede seguir el ritmo de las tropas durante maniobras y atacar tanto objetivos aéreos como terrestres cuando sea necesario.
Una solución polivalente ante nuevas amenazas
Aunque está diseñado principalmente para derribar drones pequeños y misiles de alta velocidad, lo curioso es que este artefacto modular se puede instalar tanto en vehículos blindados como en buques de guerra. Y ya ha demostrado su eficacia: según Yu Bin, han logrado derribar cualquier dron pequeño con solo una barrera.
No obstante, las miradas están puestas en el futuro. Fu Qianshao, experto militar chino, comentó al Global Times: “Veo grandes perspectivas para esta nueva arma”. Y tiene razón; con la creciente amenaza que representan los drones en los campos de batalla actuales, este cañón podría convertirse en un producto muy buscado a nivel internacional.
A medida que avanzamos hacia un mundo cada vez más complejo y desafiante desde el punto de vista militar, ¿será este cañón la respuesta que todos estábamos esperando?