Mallorca. La plantilla del Real Mallorca se despertó con una noticia que nadie esperaba. En medio de un entrenamiento, mientras el equipo se preparaba para volar a Valencia, ocurrió un robo en el vestuario que ha dejado a todos con una sensación de impotencia. Las primeras informaciones indican que varios jugadores, entre ellos Dominik Greif, Pablo Maffeo y Copete, han sido víctimas de este asalto que ha sacudido la tranquilidad del grupo.
La cosa no es trivial; han desaparecido varias cadenas de oro cargadas de significado sentimental. Para muchos de estos futbolistas, estas joyas representan más que un simple objeto; son recuerdos y lazos con sus seres queridos. No hay nada más frustrante que ver cómo alguien entra a tu espacio personal y te roba lo que valoras.
La Policía Nacional ya está en acción
A raíz del incidente, la Policía Nacional ha comenzado las investigaciones pertinentes para dar con los responsables. La preocupación es palpable entre los jugadores, quienes buscan concentrarse en lo que queda de LaLiga y dejar atrás este amargo sabor. Sin embargo, el malestar no se va tan fácilmente; después de todo, ¿quién puede olvidar así como así lo sucedido?
Las primeras pesquisas están avanzando y se espera que pronto haya novedades sobre este hurto inaceptable. En el club saben que hay cosas más importantes en juego ahora mismo, pero la verdad es que nadie debería tener que lidiar con algo así. A pesar del revés emocional, los mallorquinistas están decididos a seguir luchando por Europa y demostrar su valía dentro del campo.