En Palma, la historia reciente nos ha traído un giro inesperado. La calle Fra Juníper Serra, que siempre ha lucido sus bordillos de piedra como un símbolo de nuestra identidad, no iba a ser una excepción. El área de Infraestructuras del Ayuntamiento ha decidido escuchar las voces de los ciudadanos y ha prometido mantener estos bordillos tan característicos.
Una victoria para todos
La Asociación para la Revitalización de los Centros Antiguos (ARCA) ha tenido un papel fundamental en este cambio. Tras denunciar que durante las obras en Son Armadans se estaban retirando esos bordillos históricos, el consistorio no solo escuchó, sino que también rectificó su rumbo. En una nota reciente, ARCA celebró esta capacidad de respuesta y elogió el compromiso del ayuntamiento por conservar lo que nos hace únicos.
Así que, aunque se realizarán algunas ampliaciones con bordillo de hormigón en las esquinas —algo que consideran normal— es un alivio saber que los elementos originales seguirán formando parte del paisaje urbano. Es esencial proteger lo nuestro y garantizar que futuras generaciones puedan disfrutarlo también.